Infección en el área o infección
sistémica portador de virus Hepatitis C
Se puede producir una infección por varias causas, la más
frecuente es que la herida permanece expuesta en una zona de ingreso fácil a
microorganismos especialmente la Hepatitis
C que se adquiere
por falta de higiene (instrumento mal esterilizado) y el contacto directo en
sangre. No desinfectar la zona adecuadamente, no utilizar el antiséptico
adecuado, no seguir el plan de cuidados para la perforación, atenciones para la
cura posterior y utilizar objetos que hayan sido utilizados por terceras
personas y no hayan pasado un proceso de esterilización se considera
comportamiento de alto riesgo. Se deben seguir los cuidados estrictamente y aun
así no es posible evitar infecciones que en ocasiones pueden llegar a ser muy
graves. En las zonas labiales puede ocasionar algún desgarro en la encía con
pérdida de hueso periodonto con daño permanente en incisivos inferiores y
posteriormente la pérdida dental inminente. Se ha intentado utilizar perforados
de plástico anti tetánico sin ninguna ventaja aún. También hay
que remarcar casos extremos como perdida del cartílago, infecciones
estomacales, y en el sistema sanguíneo. Aun así, tomando precauciones siempre
hay riesgos. El cáncer de hígado o hepatocarcinoma derivado por virus de Hepatitis C se
mantiene como una infección silenciosa y sin prácticamente síntomas hasta por
20 años posteriormente a la infección del virus.
Riesgos médicos
Perforación de un nervio o de un vaso
sanguíneo.
La perforación en el labio inferior
puede provocar perdida de hueso periodonto en los incisivos inferiores con
posterior pérdida dental.
Desgarros: Por traumatismos de la joya
insertada.
Cáncer de lengua al trozar el aporte
sanguíneo de los principales vasos y necrosis de la zona con daño irreparable.
Edema de glotis: Por varias causas
alergias, infecciones, se produce una inflamación de la lengua, la glotis, los
tejidos de la boca (oro faringe) y como consecuencia, asfixia.
Rechazo del cuerpo: cada cuerpo actúa
ante una joya de distintas maneras, puede ser que el cuerpo lo acepte y se
cicatrice correctamente o lo rechace y al cabo de unos meses no puedas llevarlo
más.
Puede provocar recesiones gingivales
por el trauma continuado del piercing contra los dientes o encías.
Aunque
las perforaciones en la lengua suelen coger un color un poco morado alrededor,
es totalmente normal. Esto es debido a la inflamación de la zona.